Entendiendo la interferencia tecnológica (“Technoference”) y su Impacto en la Salud Mental Adolescente
En la era digital, la tecnología juega un papel central en nuestras vidas. Nos conecta, nos informa y nos entretiene, pero también puede interferir en las relaciones familiares. En muchas ocasiones nos distancia de nuestros seres queridos y, algo muy importante es que puede afectar el bienestar emocional de nuestros hijos.
Los otros días estaba tan enfocado en contestar un mensaje de texto, que no me di cuenta de que mis hijos me preguntaban algo. Al mirarlos, pude observar su cara de frustración y decepción. No les puedo negar que me sentí culpable. Esta situación es un ejemplo sencillo del fenómeno que se llama “technoference”. A continuación, exploraremos qué es, cómo afecta a los adolescentes y qué podemos hacer para mitigar sus efectos.
¿Qué es la “technoference”?
El término “technoference” se refiere a las interrupciones en las interacciones sociales cotidianas debido al uso de la tecnología. Imagina que sales a cenar con tu familia y, en el medio de esa cena te desconectas del mundo mirando tu teléfono inteligente. Estas interrupciones, aunque parezcan inofensivas, pueden tener un impacto significativo, especialmente en las relaciones entre padres e hijos.
Hallazgos clave sobre el impacto de la technoference
- Uso problemático de la tecnología por los padres: Tanto madres como padres que reportan dificultades para resistir el uso excesivo de dispositivos digitales son más propensos a que la tecnología interrumpa sus interacciones con los hijos.
- Interferencia en las relaciones: Estas interrupciones frecuentes se asocian con comportamientos problemáticos en los niños, como agresividad (comportamientos externalizantes) y ansiedad o tristeza (comportamientos internalizantes).
- Aumento de ansiedad en adolescentes: Los adolescentes emocionalmente vulnerables, especialmente aquellos con niveles altos de ansiedad, son más sensibles a la technoference de los padres, sintiendo una desconexión emocional que puede profundizar sus dificultades.
- Inatención e hiperactividad: Los adolescentes que perciben mayores niveles de technoference de sus padres muestran mayor tendencia a comportamientos relacionados con la falta de atención e hiperactividad en el tiempo.
¿Qué podemos hacer como padres?
La tecnología es una herramienta útil, pero también puede convertirse en un obstáculo para la conexión emocional si no se utiliza de manera consciente. A continuación, te compartimos algunos consejos prácticos para minimizar los efectos de la “technoference”:
- Establecer tiempos sin tecnología: Define momentos específicos para interactuar con tus hijos sin interrupciones tecnológicas, como durante las comidas, antes de dormir o mientras realizan actividades juntos.
- Modelar buenas prácticas: Los niños y adolescentes aprenden más por lo que ven que por lo que se les dice. Si muestras que puedes desconectarte de la tecnología para estar presente, ellos seguirán tu ejemplo.
- Hablar abiertamente: Ten conversaciones sinceras sobre el uso de la tecnología en el hogar. Incluye a tus hijos en la creación de reglas y límites, de manera que se sientan parte del proceso.
- Buscar apoyo profesional: Si notas que tu hijo está luchando con síntomas de ansiedad, inatención o hiperactividad, considera buscar la ayuda de un psiquiatra o terapeuta especializado en niños y adolescentes.
Conclusión
La “technoference” es un recordatorio de cómo la tecnología, si bien es una herramienta poderosa, puede afectar negativamente nuestras relaciones y la salud mental de nuestros hijos si no se maneja con cuidado. Al tomar conciencia y hacer pequeños cambios en nuestros hábitos diarios, podemos fomentar un ambiente más saludable y conectado en el hogar.
Recuerda, estar presente para nuestros hijos es uno de los regalos más valiosos que podemos ofrecerles. Cada momento de conexión sin distracciones cuenta para fortalecer su bienestar emocional y nuestra relación con ellos.
